Este pesebre lo compré en noviembre de 2014 en la tienda Falabella, de Miraflores, en Lima, Perú. Pero su origen es Filipinas. Mide unos 30 centímetros de alto y está hecho con tela, paja, resina y alambre. Dicen que en Filipinas tienen la temporada navideña más larga del mundo, ya que comienzan a ponerse "en clima" a partir de septiembre y las celebraciones se extienden hasta enero. Se trata de un país donde el 90 por ciento de sus habitantes es cristiano, de mayoría católica. Los espacios públicos se iluminan con los colores de la Navidad, pero la celebración no se queda en un mero hecho exterior, turistico o comercial. Los filipinos celebran la Navidad con fe. Una de las tradiciones es el "Simbang Gabi", una serie de misas que se celebran a lo largo de nueve noches y que culmina en la víspera de Navidad. Un elemento típico de la Navidad filipina son los faroles con forma de estrella, confeccionados con papel y bambú y que, desde su creacion, se disponían en ca
«Vayamos hasta Belén y veamos lo que ha sucedido» (Lc 2, 15).