Estas tres piezas tienen un significado especial para mí. Son del colegio María Auxiliadora, del barrio de Almagro, en Buenos Aires, donde me eduqué durante trece años y que aún siento como mi segunda casa.
Cada año, para el 8 de diciembre, las hermanas de esta comunidad tienen por tradición decorar en clave navideña los ambientes de la casa y armar uno o más pesebres.
"Esta preparación nos reúne como comunidad en torno a Jesús Niño y a la Sagrada Familia y nos ayuda a disponer el espíritu para las fiestas que se aproximan y para hacerle un espacio especial al Niño Jesús en nuestro corazón y en nuestra vida", me cuenta una de las hermanas de la comunidad.
Uno de los pesebres se arma en la capilla del colegio, dedicada a María Auxiliadora.
En el Adviento de 2012, el pesebre fue montado a los pies del altar.
Hace varias décadas atrás las hermanas solían armar un pesebre grande, con muchas figuras, en el fondo de la iglesia.
El pesebre actual tiene quince figuras de yeso, tal vez de origen italiano. Además de la Sagrada Familia, están los Reyes Magos en actitud de adoración, un buey, un burrito y ocho ovejitas.
María y José están en oración contemplativa ante el Niño. Los Reyes, a diferencia de otros pesebres donde se los ve de frente, están de espaldas al observador, mirando a Jesús, verdadero centro de la escena. También los animales lo miran...
Hay rocas, que nos hablan de la gruta de Belén, y un fondo de papel azul, un cielo rebosante de estrellas para recibir al Niño. El altar de la capilla hace de marco perfecto para esta escena.
El Niño de este pesebre descansa sobre una cuna de madera, con paja. Tiene una expresión vivaz en sus ojazos. Mira al cielo, imagino que dando gloria al Padre...
También en la capilla, las hermanas colocan todos los años otra imagen del Niño Jesús sobre una mesita para la adoración de la comunidad y de todos los fieles que se acercan en tiempo de Adviento y de Navidad a esta casa, fundada en 1879.
Es una imagen también de yeso. Tiene ojos azules y cabello castaño. Me recuerda al Niño que tiene la Auxiliadora en brazos...
Un detalle: como el Niñito del pesebre bajo el altar, éste también tiene juntos los dedos índice y medio de su manito derecha, un signo que aparece en otras imágenes de Jesús.
Las hermanas armaron otro pesebre en el comedor de la comunidad. Es una linda forma de llevar la Navidad a un ámbito tan cotidiano... Tiene tres piezas. La Virgen y San José están velando por el Niño... Jesús está completamente dormido... Es una imagen muy dulce.
La comunidad desarma los pesebres para la fiesta del Bautismo del Señor, que cierra del tiempo litúrgico de la Navidad... Igual, aquí hay "niñitos Jesús" todo el año, los de las decenas de imágenes de la Auxiliadora que hay en los distintos rincones de esta casa.
Cada año, para el 8 de diciembre, las hermanas de esta comunidad tienen por tradición decorar en clave navideña los ambientes de la casa y armar uno o más pesebres.
"Esta preparación nos reúne como comunidad en torno a Jesús Niño y a la Sagrada Familia y nos ayuda a disponer el espíritu para las fiestas que se aproximan y para hacerle un espacio especial al Niño Jesús en nuestro corazón y en nuestra vida", me cuenta una de las hermanas de la comunidad.
Uno de los pesebres se arma en la capilla del colegio, dedicada a María Auxiliadora.
En el Adviento de 2012, el pesebre fue montado a los pies del altar.
Hace varias décadas atrás las hermanas solían armar un pesebre grande, con muchas figuras, en el fondo de la iglesia.
El pesebre actual tiene quince figuras de yeso, tal vez de origen italiano. Además de la Sagrada Familia, están los Reyes Magos en actitud de adoración, un buey, un burrito y ocho ovejitas.
María y José están en oración contemplativa ante el Niño. Los Reyes, a diferencia de otros pesebres donde se los ve de frente, están de espaldas al observador, mirando a Jesús, verdadero centro de la escena. También los animales lo miran...
Hay rocas, que nos hablan de la gruta de Belén, y un fondo de papel azul, un cielo rebosante de estrellas para recibir al Niño. El altar de la capilla hace de marco perfecto para esta escena.
El Niño de este pesebre descansa sobre una cuna de madera, con paja. Tiene una expresión vivaz en sus ojazos. Mira al cielo, imagino que dando gloria al Padre...
También en la capilla, las hermanas colocan todos los años otra imagen del Niño Jesús sobre una mesita para la adoración de la comunidad y de todos los fieles que se acercan en tiempo de Adviento y de Navidad a esta casa, fundada en 1879.
Es una imagen también de yeso. Tiene ojos azules y cabello castaño. Me recuerda al Niño que tiene la Auxiliadora en brazos...
Un detalle: como el Niñito del pesebre bajo el altar, éste también tiene juntos los dedos índice y medio de su manito derecha, un signo que aparece en otras imágenes de Jesús.
Las hermanas armaron otro pesebre en el comedor de la comunidad. Es una linda forma de llevar la Navidad a un ámbito tan cotidiano... Tiene tres piezas. La Virgen y San José están velando por el Niño... Jesús está completamente dormido... Es una imagen muy dulce.
La comunidad desarma los pesebres para la fiesta del Bautismo del Señor, que cierra del tiempo litúrgico de la Navidad... Igual, aquí hay "niñitos Jesús" todo el año, los de las decenas de imágenes de la Auxiliadora que hay en los distintos rincones de esta casa.
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