Daniela Vulcano, otra amiga del alma, tiene varios pesebres en su casa. Dani es diseñadora gráfica y tiene un gusto excelso por la estética. Por eso, estudia cada pesebre y los coloca en distintos sectores de su casa, de acuerdo a colores y elementos.
Este pesebre que nos comparte espera la Navidad en el patio cubierto, entre las plantas, un sitio curioso para un belén.
Es una sola pieza de cerámica, muy pequeña, a la que se le sale el bastón de metal de José y Dani, con sumo cuidado, lo guarda año a año para que no se le pierda...
"Me gustan los colores cálidos y tierra que tiene, por eso va al patio y lo pongo entre mis plantas, junto con toda la decoración de esos tonos. Las figuras están modeladas con un gesto infantil y suave, aniñados. Me parece hasta simpático. Y, dentro del 'no detalle', presenta bastantes elementos, guardas y pasajes cromáticos", describe Daniela.
Los animales, observa, "le dan un marco interesante de guardianes y calor, sin necesidad de la típica choza".
"Y el José en altura también da ese aspecto de protector y padre", apunta Daniela.
Este pesebre que nos comparte espera la Navidad en el patio cubierto, entre las plantas, un sitio curioso para un belén.
Es una sola pieza de cerámica, muy pequeña, a la que se le sale el bastón de metal de José y Dani, con sumo cuidado, lo guarda año a año para que no se le pierda...
"Me gustan los colores cálidos y tierra que tiene, por eso va al patio y lo pongo entre mis plantas, junto con toda la decoración de esos tonos. Las figuras están modeladas con un gesto infantil y suave, aniñados. Me parece hasta simpático. Y, dentro del 'no detalle', presenta bastantes elementos, guardas y pasajes cromáticos", describe Daniela.
Los animales, observa, "le dan un marco interesante de guardianes y calor, sin necesidad de la típica choza".
"Y el José en altura también da ese aspecto de protector y padre", apunta Daniela.
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