Esta pieza, de origen italiano, la compré en diciembre de 2005 en la tienda Días de Fiesta, en Almagro, Buenos Aires.
La figura, en blanco y ocre con destellos dorados, muestra a un ángel custodiando al Niño en el pesebre.
La Biblia no especifica cuál fue el ángel guardián de Jesús, pero bien pudo haber sido el arcángel Miguel, príncipe de las milicias celestiales y custodio de la Iglesia. A él, al que cuidó al Niño Dios y a todos nuestros ángeles guardianes va esta oración:
Ángel de la guarda,
dulce compañía,
no me desampares
ni de noche ni de día,
hasta que descanse
en los brazos de
Jesús, Jose y Maria.
La figura, en blanco y ocre con destellos dorados, muestra a un ángel custodiando al Niño en el pesebre.
La Biblia no especifica cuál fue el ángel guardián de Jesús, pero bien pudo haber sido el arcángel Miguel, príncipe de las milicias celestiales y custodio de la Iglesia. A él, al que cuidó al Niño Dios y a todos nuestros ángeles guardianes va esta oración:
Ángel de la guarda,
dulce compañía,
no me desampares
ni de noche ni de día,
hasta que descanse
en los brazos de
Jesús, Jose y Maria.
Comentarios
Publicar un comentario