Este pesebre me lo regaló en diciembre de 2012 papá, que lo compró en la tienda Foreva, en el barrio de Once, en Buenos Aires.
Es una sola pieza, de cerámica, con las figuras del pesebre que simulan estar dentro de una piña alargada recortada.
Al atesorar las semillas del pino, la piña es símbolo de fertilidad y de vida nueva. Es por ello que es uno de los elementos típicos de la ornamentación navideña, donde celebramos un nacimiento, el de Jesús, que es portador de Vida nueva para todos. ¡Un símbolo maravilloso para los días de gracia y esperanza que nos tocan vivir!
Es una sola pieza, de cerámica, con las figuras del pesebre que simulan estar dentro de una piña alargada recortada.
Al atesorar las semillas del pino, la piña es símbolo de fertilidad y de vida nueva. Es por ello que es uno de los elementos típicos de la ornamentación navideña, donde celebramos un nacimiento, el de Jesús, que es portador de Vida nueva para todos. ¡Un símbolo maravilloso para los días de gracia y esperanza que nos tocan vivir!
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