Fue el Papa Juan Pablo II quien en 1982 inició la tradición de colocar un pesebre en la Plaza de San Pedro, a las puertas del Vaticano, para Navidad. Treinta años después una muestra montada en el Museo del Bicentenario, de Buenos Aires, expone, por primera vez fuera de la Santa Sede, réplicas de los pesebres diseñados para San Pedro y los Palacios Vaticanos. La pieza central de esta exposición es una copia a escala del pesebre que el 24 de diciembre de 2012 fue inaugurado por el Papa Benedicto XVI en la plaza San Pedro. Este conjunto fue diseñado por el artista italiano Francesco Artese y presenta un espectacular marco para la recreación del nacimiento de Jesús: las fachadas de las edificaciones en piedra de los Sassi, un sitio histórico de la ciudad de Matera, en el sur de Italia, declarado por la Unesco como patrimonio de la Humanidad, y de las iglesias de la Basilicata. Fue la región de la Basilicata la que, a través de la Fundación Juan Pablo II para la Juventud, ha dona
«Vayamos hasta Belén y veamos lo que ha sucedido» (Lc 2, 15).