Hoy, 30 de octubre de 2013, se cumple un año
desde que El 60 prendió sus motores y se puso en marcha, camino hacia a Belén.
Ha sido maravilloso todo lo que he ido descubriendo a lo largo de la ruta.
Compartir el momento bello de la llegada de Jesús representado en los pesebres me ha dado, primero, la posibilidad de rezar y meditar sobre el misterio grande de la Navidad, algo por lo que siempre daré gracias a Dios.
He descubierto que este misterio es siempre nuevo, siempre distinto, y que se encarna una y otra vez en los corazones... Por ello siempre se está en camino a Belén: siempre se llega y se vuelve a andar porque la búsqueda de Jesús se renueva cada día.
En este camino he encontrado a otras personas también enamoradas del santo pesebre. Muchas de ellas se animaron a compartir sus pesebres y reflexiones en el blog y para mi esto ha sido de gran riqueza.
A mis seres queridos les agradezco el apoyo recibido, la participación y la difusión del blog entre sus conocidos.
También un agradecimiento especial a radios, medios gráficos y sitios web que se han interesado por esta iniciativa y la han dado a conocer.
El resultado ha sido que, en este viaje a Belén, El 60 hace parada cada día en los más diversos, remotos e inimaginables sitios alrededor del mundo, donde Jesús también nace.
Desde Canadá a Chile, Cuba y Puerto Rico, Nueva Zelanda, China y Japón, Rusia, el Reino Unido, Turquía, Emiratos Árabes y hasta Kazajistán, y desde decenas de otros países de los cinco continentes han ingresado ya al blog unos 9.000 internautas.
Si al menos uno de ellos se conmovió con la imagen del Niñito Jesús en el pesebre, ya habrá valido la pena poner en marcha este proyecto.
Los invito a todos a seguir en este viaje y desde hoy también los espero en Twitter, Facebook y Google+.
Ha sido maravilloso todo lo que he ido descubriendo a lo largo de la ruta.
Compartir el momento bello de la llegada de Jesús representado en los pesebres me ha dado, primero, la posibilidad de rezar y meditar sobre el misterio grande de la Navidad, algo por lo que siempre daré gracias a Dios.
He descubierto que este misterio es siempre nuevo, siempre distinto, y que se encarna una y otra vez en los corazones... Por ello siempre se está en camino a Belén: siempre se llega y se vuelve a andar porque la búsqueda de Jesús se renueva cada día.
En este camino he encontrado a otras personas también enamoradas del santo pesebre. Muchas de ellas se animaron a compartir sus pesebres y reflexiones en el blog y para mi esto ha sido de gran riqueza.
A mis seres queridos les agradezco el apoyo recibido, la participación y la difusión del blog entre sus conocidos.
También un agradecimiento especial a radios, medios gráficos y sitios web que se han interesado por esta iniciativa y la han dado a conocer.
El resultado ha sido que, en este viaje a Belén, El 60 hace parada cada día en los más diversos, remotos e inimaginables sitios alrededor del mundo, donde Jesús también nace.
Desde Canadá a Chile, Cuba y Puerto Rico, Nueva Zelanda, China y Japón, Rusia, el Reino Unido, Turquía, Emiratos Árabes y hasta Kazajistán, y desde decenas de otros países de los cinco continentes han ingresado ya al blog unos 9.000 internautas.
Si al menos uno de ellos se conmovió con la imagen del Niñito Jesús en el pesebre, ya habrá valido la pena poner en marcha este proyecto.
Los invito a todos a seguir en este viaje y desde hoy también los espero en Twitter, Facebook y Google+.
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