Ir al contenido principal

Entradas

Mostrando entradas de octubre, 2017

¡Cinco años! A tiempo... y a destiempo

Hoy este proyecto de El 60 a Belén, desde el blog y las redes sociales, cumple cinco años. En este tiempo he descubierto que no colecciono pesebres. Colecciono "oportunidades" para poder escribir de Dios y sus misterios desde la humilde y tierna imagen del pesebre. Y estas oportunidades me son dadas, como don, no solo cuando consigo un nuevo pesebre, sino, mayormente, por tantas personas generosas que tienen presente esta iniciativa y me regalan un belén o comparten el que tienen. Así, me regalan estas oportunidades para hablar de Dios y llegar a otros con una invitación a contemplar y acercarse al Niño Jesús. Cuando inicié este proyecto pensé que, fuera del tiempo de Adviento y Navidad, sería difícil alimentarlo y sostenerlo. ¡Me equivoqué! La Providencia se encarga muy bien de que no me falten "oportunidades" en ninguna época del año. A veces busco pesebres en pleno junio y me responden: "no tenemos, no es temporada". Les respondo: "¡es que

Pesebres invitados #53: Con arte digital

Estas imágenes me las envió Caty Obeid, una amiga de El 60 a Belén. Ya habíamos compartido algunos de sus trabajos en 2013 y 2014 . Nacida hace 77 años en Victoria (Entre Ríos, noreste de Argentina) y arquitecta de profesión, Caty hace -y enseña a hacer- pesebres en porcelana fría que monta sobre elementos de la naturaleza que encuentra, como cortezas, vainas secas o piñas. Pero también es artista digital. Desde 2008 crea imágenes con un programa de diseño y los pesebres son parte de sus creaciones. "El tema del pesebre siempre me atrajo. Me enternece el Niño Jesús, tan humilde en su cunita", me comenta Caty. Dice el Papa Francisco que "el artista es el testigo de lo invisible, y la obra de arte es la prueba más fuerte de que la encarnación es posible". También en sus nuevos lenguajes y formas expresivas, como el digital, el arte es -está llamado a serlo- instrumento de evangelización porque "la belleza representa un camino para encontrar al Señor&qu

#226 Sedes Sapientiae

Este pesebre me lo regalaron mis padres en agosto de 2017. Lo compraron en la santería de Nuestra Señora del Carmelo, en Buenos Aires, pero fue hecho en China y es de la marca Montefiori. Es una única pieza, en resina, con las figuras de la Sagrada Familia: san José sostiene un farol y abraza a María, que sobre su falda tiene sentado al Niño Jesús. La imagen de María que en su regazo tiene sentado al Niño fue en el arte religioso medieval una representación muy popular de la Virgen como "sedes Sapientiae", o "trono de la Sabiduría". Con el correr de los siglos, el arte siguió representando esta figura, aunque dándole mayor movimiento, con gestos de ternura maternal, como en este pesebre, en el que la Virgen sostiene la mano del Niño y le mira con suma dulzura. Jesús es la Sabiduría encarnada y María, su trono. Dice san Luis María Grignion de Montfort, en " El amor de la Sabiduría eterna ", que un deseo ardiente, oración continua y mortificación son tre

#225 Nuestro barro

Este pesebre me lo regaló en agosto de 2017 mi amigo Claudio Rodríguez, que lo compró en una feria de la parroquia Buen Pastor, de Buenos Aires. Las figuras de María, José y el Niño son de yeso y están dentro de una vasija de barro. Arcilla. Barro. Agua y tierra. Algo tan simple, tan a la mano. Frágil, maleable. Algo que, a priori, no tiene valor y, encima, ensucia. Hasta que alguien decide tomarlo entre sus palmas, modelarlo con sus dedos, darle la forma concebida en su mente y, si es un artista verdadero, transformarlo en algo bello y valioso. De barro somos nosotros. Es una imagen que aparee en la creación del hombre en el Génesis. ¡Y vio Dios que su creación era muy buena! "Como la arcilla en la mano del alfarero, así están ustedes en mi mano", le dice Dios al profeta Jeremías. Dios, como buen alfarero, nos quiere dar su forma, la forma más bella, más perfecta. Eso requiere de nuestra docilidad, de ser arcilla blanda entre sus manos. Y no siempre es fácil vencer n